En una actitud inexplicable, un joven caminaba por las calles de la ciudad pateando y rompiendo los espejos retrovisores de vehículos estacionados.
El joven fue identificado como Fernando José Casimiro de 20 años, quien circulaba por calle Don Bosco al 1900 cuando un móvil policial se cruzó en su camino y observó como el joven escapó rápidamente.
Tras una corta huida, este delincuente fue demorado. Los efectivos policiales observaron un espejo retrovisor de un automotor tirado en las inmediaciones, por lo que al realizar un relevamiento de la zona se encontraron con varios vehículos con daños en todos los espejos retrovisores izquierdos.
El sujeto quedó con una causa por flagrancia por el delito de “daños”, sin perder su libertad.
