En esta línea, criticó que “hace tiempo se aplicaban ajustes, descuentos solidarios o se pagaban los salarios en cuotas. No fue hace muchos años. Llamo a tener memoria. Nada de eso pasa hoy: los salarios se pagan en tiempo y forma, sin recortes, y hay una decisión política con la que el Estado pone los recursos. Esta administración nos permite decir que la Caja Jubilatoria tiene una reserva financiera que da tranquilidad a los compañeros jubilados, y a los activos”.
Asimismo, aseguró que “tenemos que seguir trabajando en mejorar los procesos administrativos y acortar los tiempos en los que se acceden a las jubilaciones. Tuvimos paritarias. Las condiciones van cambiando, a veces para bien, y a veces para mal”.
“Quiero recordar que somos el Gobierno que recuperó las paritarias libres, que era un reclamo de muchos, que hoy nos reclaman y hace unos años acompañaban el ajuste solidario”.
Además, puso en valor que “en las políticas de cuidado, se encuentra nuestra OSEF. En este punto, algunos hablan muchísimo, sin detenerse a ver cuál es la realidad cierta. Muchas veces hablamos, tuiteamos y colgamos cosas en las redes sociales, pero tenemos que entender el panorama nacional. Esto no es posible si no lo incorporamos entre todos en la agenda política”.
Melella mencionó que “los avances tecnológico, las mejoras sanitarias y una mayor expectativa de vida generan nuevos requerimientos e inversiones. Para abordar estos desafíos, es fundamental que todos los actores involucrados trabajemos juntos para decidir qué servicios ofrecer y cómo financiarlos de manera sostenible. Muchos pedimos y exigimos mucho, pero debemos contar con las finanzas y los requerimientos económicos”.
Asimismo, expuso que “se realizó una auditoría, y el contralor confirmó que el déficit se debe a variables externas. Sé que reditúa más decir que es por el Gobierno provincial, pero un organismo de contralor lo certificó. El gran déficit fue por condiciones como la inflación, el crecimiento de la expectativa de vida o el mejoramiento continuo de las tecnologías. Los números son caros”.
En base a esto último, Melella anunció que “hay un informe muy serio del Tribunal de Cuentas, que recomienda algunas acciones. En un mes y medio más, vamos a tener el desarrollo final del análisis de por qué estamos. Primero, estamos terminando con el plan de pago a prestadores, para decirles cuánto les debemos y cómo les vamos a pagar. También, vamos a armar nuevos convenios y contratos con prestadores”.
“Es verdad que cada prestador tiene su estructura de costos, pero no puede ser en base a la OSEF. Queremos que todos paguen. Que el 49% que hoy no paga, tenga que pagar. También, que los entes que no aportan, empiecen a aportar. Durante su vida activa tienen OSDE y Swiss Medical, pero cuando necesitan más acompañamiento vienen a la OSEF y pagan como cualquiera. Queremos que todos los entes que no aportan en su vida activa, lo hagan desde ahora”, siguió.
A esto sumó: “Incrementaremos un mayor aporte personal de toda la planta política. Fortaleceremos aún más el sistema público”.
Como parte de este paquete de medidas, adelantó que buscarán que “las utilidades del BTF vayan a fortalecer la Obra Social, para el pago de prestadores y fortalecer el sistema hasta que estemos equilibrados. Faltan muchas más medidas. Hay que discutir qué servicios queremos y qué costos tienen para pagarlos. No hay otra forma”.
Además, el Gobernador ponderó que “durante estos 5 años al frente del Ejecutivo, enfrentamos una inflación de 2400% en el sector de salud, cuando el aumento de los prestadores fue de 946%. Este Gobierno envió recursos equivalentes al 2200%. Sin esta decisión, el déficit sería de 7 mil millones”.
“Ojalá todos los que quieran ser gobernadores, vean que hay un problema de recursos y no de gestión”.
Al mismo tiempo, juzgó que “a veces, por oportunismo político o mala fe, afirman que esta gestión dejó de fortalecer la obra social. Es necesario que trabajemos con responsabilidad y colaboración, para que todos puedan aportar a la medida de sus posibilidades, y no en su etapa pasiva. Muchos no aportan en su juventud, y cuando se jubilan reciben los beneficios sin haber aportado”.
Por último, puso en valor que pudieron “sostener la cobertura en los medicamentos con planes especiales, a pesar de que a nivel nacional se redujeron infinidad de coberturas. Logramos mantener los servicios en la atención de patologías complejas, en los principales hospitales del país, como el Británico o el Güemes”.
“La obra social fue pionera en la implementación de la receta electrónica. Cuando el Gobierno nacional dispuso la obligatoriedad, en la provincia ya la teníamos en marcha hacía 2 años. Muchas veces no había una auditoría o control, porque muchas cuestiones eran excesivas para el real cuidado del paciente”, cerró.